miércoles, noviembre 19, 2008

Lagrimas

Lágrimas brotaron de sus ojos... palabras incoherentes fueron vomitadas por su boca... golpes casi ciegos dados a diestra y siniestra... orgullo de la inconciencia... sentencia de los jueces que locamente entregaron su última palabra... su veredicto... te encontramos culpable que querer vivir y ser feliz, por lo que te condenamos a cadena perpetua, desterrándote a las tierras olvidadas del país del mas allá...

Culpable, culpable, retumbo en la sala y dos lágrimas mojaron sus mejillas... condenada a cadena perpetua y destierro eterno, por haber querido ser feliz... por haber amado con todo su ser... sola, destinada a la tierra de nadie, en los últimos confines del mundo...

3 comentarios:

Mi Ser dijo...

Lagrimas que bañan el Creer….
Cuantas de aquellas han brotado mi Querida Luz….
Y Cuantas más nos quedan por Derramar…

Quien puede hacer juicio del Anhelo tan ansiado y tan pocas veces logrado….
Quien puede revertir el dolor con un suspiro en el creer nuevamente… si tan desarmado queda el corazón?....

Besos para Aquella…
Para la que Creyó….
Para quien no lo importó la lagrima que hoy derrama…
Simplemente Creyó… y Amó.

Abrazos de Sol
Mi Ser.

La Gata Coqueta dijo...

Amar cuesta lagrimas y destierro más estar condenada de por vida, es crudo pero es cierto.

Y al que no le halla pasado que se sienta muy dichosa.

Un besazo.

Anónimo dijo...

Imagino que alguna vez has escuchado la canción Castillos en el Aire, de Alberto Cortez...es magia la que haces, de cuando en cuando, al referirme tus escritos a canciones que me encantan e identifican.

Me podrán condenar en su momento...pero al menos intenté y logré ser feliz por un instante, a diferencia de mis acusadores grises. ¿No prefieres eso también? Saludos afectuosos, de corazón.